ONU DEFIENDE PRESOS CUBANOS

ONU defiende presos cubanos
en EE.UU.


NACIONES Unidas dice que el encarcelamiento de cinco cubanos en Miami, Estados Unidos, bajo cargos de espionaje viola acuerdos internacionales.
El Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas dijo que el juicio que se realizó hace cuatro años no fue imparcial, y que las sentencias de entre quince años y dos cadenas perpetuas fueron excesivamente severas.
El panel de la ONU señaló que a Los Cinco detenidos se les había negado el acceso apropiado a sus abogados y a evidencia importante.
Cuba considera que Los Cinco hombres son unos héroes que sólo estaban tratando de evitar que grupos de exiliados en Miami atacaran al gobierno de Fidel Castro.
Nuestro corresponsal en La Habana, Fernando Ravsberg, conversó con las esposas de Gerardo Hernández y René González, dos de Los Cinco cubanos presos.
Adriana Pérez y Olga Salanueva no han podido visitar a sus esposos pues Washington les ha negado la visa para entrar a los EE.UU.
¿Qué argumento manejan las autoridades estadounidenses para negarles la entrada al país?
Olga: Las visas las han negado con diferentes argumentos que van cambiando a medida que los desmentimos. Dicen que somos un peligro para la seguridad de los EEUU.
Ellos llevan 7 años presos y muy pocos familiares los han visitado hasta ahora. Tardamos meses en comunicarnos telefónicamente con la Oficina de Intereses de los EE.UU. en La Habana.
Nos dan una cita para dentro de tres meses y nos dicen que éste no es un caso que puedan decidir allí, que tenemos que esperar una decisión de Washington, por lo que habrá que esperar tres, cuatro o seis meses. En ocasiones se han demorado más de un año.
Hasta el momento, nos han negado la visa en seis ocasiones.
Tenemos una hija que nació en 1998, es ciudadana estadounidense y no conoce a su padre. Es muy cruel.
¿Por qué niegan ser espías si estaban en EE.UU. recabando información para enviarla a Cuba?
Olga: En primer lugar, la información dada nunca comprometió la seguridad nacional de EEUU.
Las organizaciones terroristas (sic) (a las que vigilaban) son grupos que se pasean libremente por Miami y todos los días están en la TV, son los dueños de las radios, son los dueños de la política de Miami, pero no tienen nada que ver con el gobierno.
No se le puede considerar espía a una persona que no haya tomado un solo documento que ponga en peligro la seguridad nacional de un país. En todo el juicio ni un solo testigo, ni un solo documento pudo demostrar que ellos fueron espías.
¿Por qué entonces el tribunal actuó con tanta severidad con ellos?
Adriana: Tenemos que aclarar que estamos ante un caso político. Mi esposo recibió cadena perpetua por el cargo de conspiración para cometer asesinato en primer grado.
Durante los 7 meses que duró el juicio no se les permitió mudarse a otra ciudad que fuera menos hostil, como pedía la defensa, por eso, a pesar de lo que demostraban todas las pruebas, fue imposible lograr un veredicto de inocente.
Se había seleccionado un jurado que no podía ser totalmente imparcial. Era imposible, en esta ciudad, reunir doce miembros del jurado que no tuvieran algún vínculo con la mafia terrorista (sic) cubana de Miami.
Hay tal carencia de pruebas que las acusaciones de espionaje son en realidad de conspiración para cometer espionaje, porque la Fiscalía sabía de antemano que no contaba con pruebas para esto.
¿Por qué está tan segura que su esposo no tuvo que ver con el derribo de las avionetas si estaba allí para vigilar a esos grupos e informar sobre sus actividades?
Adriana: Todas estas organizaciones de Miami alardean de sus acciones, ellos se presentan ante la TV, ante las radios e informan de que van a hacer cualquier tipo de acción.
No era difícil conocer de estas acciones. Además, el día en que esas avionetas fueron derribadas por el gobierno cubano, José Basulto, el jefe de la organización Hermanos al Rescate que venía en uno de esos aviones, declaró ante la televisión que volaría hacia Cuba.
No era necesario contar con Gerardo para saber que estos aviones iban a entrar a territorio cubano.
¿Cuál es la situación de ellos en prisión?
Olga: Ellos están en cinco estados, en cinco cárceles diferentes. No pueden tener comunicación entre sí, aunque sí con sus familiares a través de correspondencia y llamadas telefónicas.
Nosotros no podemos llamarlos a ellos. La otra vía son las visitas semanales y mensuales, pero la gran mayoría de sus familiares estamos en Cuba y requerimos de una visa para poder visitarlos.
¿Cómo ven el futuro de sus esposos? ¿Creen que realmente regresarán a Cuba como afirma el gobierno cubano?
Adriana: El Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas emitió un dictamen afirmando que se trataba de un caso de detención arbitraria.
Nos ampara la esperanza de que otras organizaciones han escuchado nuestra solicitud y pueden pronunciarse a nuestro favor. No vamos a descansar hasta tenerlos aquí en Cuba.
La Corte de Apelaciones de Atlanta tiene la oportunidad de hacer prevalecer la ley. Ellos son inocentes y tenemos la ley de nuestro lado. Cuando la opinión pública conozca de estas irregularidades, se hará justicia.
¿Cuál ha sido el momento mas difícil para usted?
Olga: Todo. Nada puede ser fácil cuando a una persona la meten en la cárcel. La familia queda abandonada, lacerada, mas aún cuando se va a la cárcel defendiendo una razón justa, entonces es más difícil todavía.
Pero, de esa misma dificultad surge la fuerza, esa que ahora nos acompaña.